Tag Archives: Esclavitud financiera

Ama financiera con un pervertido

Mistress Niina es una mulatita grosera, sexy y caprichosa. Ahí donde la ven, es una persona que le gusta tenerlo todo, incluido el control sobre los hombres. Por lo visto necesitaba unas reparaciones en su habitación (a saber lo que estaría haciendo). Viene de la uni y se encuentra con un pervertido… Ella no puede estar tranquila “¿ha venido a reparar los desperfectos o a mirarme el culo?” Pero la cosa no se quedó ahí…Este cerdo perdedor tiene que pagar para tan privilegiadas vistas, así lo manda Mistress Nina.

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Atado a su Ama financial

“Después de unos días te he seducido. De la seducción se ha pasado al chantaje, ¿te acuerdas? Vale más que me hagas feliz con algunos de tus pagos, si no quieres que todos tus allegados se enteren de que tienes una amante, sería algo muy negativo para ti…Todos se volverían en tu contra. Las cosas empeorarían. La única forma de librarte de este problema es sacando la cartera…¡Me encanta ser malvada!”

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Depravada busca esclavos

Una forma dura de ver la esclavitud financiera. Lakesha és una chica que le encanta militarizar las cosas. Llevar un régimen dictatorial sobre sus esclavos, hasta los puntos más extremos. Enfundada en un traje militar y unas botas que intimidan, esta rubia alemana és capaz de todo, incluso azotarte sin parar si no ve cumplido sus deseos con un látigo o lo que tenga en ese momento. Me cuentan que és muy materialista, más de lo que algunos se pueden imaginar, y después de cumplir con su propósito no está contenta sino que quiere más. És esa mezcla de régimen militar y humillación que le mueve de la forma más dura, una auténtica depravada.

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Esto és la esclavitud financiera

Una rubita donde nos pide todo el dinero. Una rubita que nos domina, que nos obliga a estar por debajo suyo, debajo de sus pies si hace falta como un perrito faldero. Una Ama de verdad que no tiene reparos si tiene que castigarnos. Una Ama que nos humilla por creernos que teniamos el derecho a decidir lo que quisieramos por el simple hecho de pagarle. Aquí quien paga eres tú y la que manda és Ella. Aveces las cosas no son lo que parece y aveces se paga por ser humillado.

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